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Adoración Nocturna Española

 

Adorado sea el Santísimo Sacramento   

 Ave María Purísima  

 

 

2020

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Temas de reflexión

Diciembre

DESDE EL CUARTO DE GUARDIA
REFLEXIONES DE UN ADORADOR NOCTURNO PARA ORAR DESDE LA REUNIÓN PREVIA

LA ADORACIÓN NOCTURNA MOMENTO PARA CULTIVAR LA INTIMIDAD CON DIOS

1º MARCO PARA ESTA NOCHE DE DICIEMBRE

        Cristo, en cada comunión nuestra, no pasa, como visitante distinguido, por nuestra morada interior. Su cuerpo, sangre, alma y divinidad, se funden con nuestro ser en totalidad, en una unidad, como dos gotas de cera, comparable a una hipóstasis, o al menos a una segunda encarnación. ¡Fuerte cosa y misteriosa! Pero verdadera. La confesión de San Pablo “Es Cristo quien vive en mí” no es un suceso místico individual, sino que debiera ser la consecuencia de alimentarnos del alimento que nos lleva a la vida eterna. Sin perder nuestra identidad, en el proceso de perfección que es nuestra vida, nos debiéramos, cada vez más, hacernos semejantes a Cristo. Permitidme una expresión vulgar, pero que es verdadera: de lo que se come se cría. Cada vez que comulgo me voy configurando en Cristo. No es una frase bonita, aunque difícil de entender para nuestra dureza espiritual. Es la consecuencia maravillosa del amor que nos tiene nuestro Dios. ¡Vive en mí, Señor!

         2º UNA ORACIÓN JACULATORIA  AL ESPÍRITU SANTO, PARA QUE NOS ENCIENDA EN AMORES.

        Ven Espíritu Santo, infunde tu amor en nuestros corazones, para que desde el amor nos enseñes a ser uno con Cristo.

        3º TEXTO DE DON LUIS DE TRELLES PARA QUE NOS INICIE, MEDIANTE LA ORACIÓN MEDITATIVA, EN LA MARAVILLA DE SU AMOR.

        Don Luis de Trelles no inventa doctrina, difunde lo que estudia en Santos Padres, teólogos reconocidos, revelación y magisterio de la Iglesia. Recordad: Cristo no se encarnó solamente para redimirnos, sino para, en unión de amistad, hacernos hijos de Dios, herederos del cielo, y semejantes a Nuestro Señor. Ésta es nuestra fe y ésta es la magistral lección que nos da Don Luis de Trelles.  No comento. Subrayo.

        “La palabra conglutinación que supone la acción física de mezclarse dos cuerpos blandos á punto de confundirse la materia del uno con la del otro, es admirablemente adecuada a la Comunión; porque la voz significa, no sólo la adhesión de
dos cuerpos u objetos por medio de un procedimiento que los pega el uno al otro, sino también la fusión de un líquido en otro, para darle consistencia, y hacer el que se forma de la fusión más tenaz, más resistente, en lo material más viscoso, condensándolo y solidificándolo. Esto, aplicado a la Comunión sacramental metafóricamente, da una idea de unión íntima, de unidad moral, de la compenetración mutua
que contiene el misterio.

        En éste, en efecto, se acerca el Hombre-Dios a nosotros a tal extremo que su Carne se hace nuestra carne, su Sangre se mezcla con la nuestra y su Espíritu asume el nuestro, dadas las debidas disposiciones, hasta llegar a la frase famosa
do San Pablo, de que viva, ya no el hombre, sino Cristo en el hombre.  Y hay en ello de asombroso que no se trata sólo de una unión transitoria, sino de una unión permanente, si no lo estorba la falta de correspondencia de nuestra parte, pues el pecado despide el estarlo de gracia, y aunque siempre queda lo que dicen los teólogos ex opere operato, falta algo a la unión de los términos por uno de los dos. …

        Esto, aplicado a la Comunión sacramental metafóricamente, da una idea de unión íntima, de unidad moral, de la compenetración mutua que contiene el misterio. …..Y hay en ello de asombroso que no se trata sólo de una unión transitoria, sino de una unión permanente, si no lo estorba la falta de correspondencia de  nuestra parte, pues el pecado despide el estarlo de gracia…..

        Es preciso parar en ello la atención y profundizar, ahondar con la mente, esta unión sublime y santa. Es preciso repetírselo el hombre á sí propio y meditarlo en el reposo del alma. Que la Comunión sacramental produce una unión verdadera y profunda, una asunción del espíritu del hombre por el Espíritu de Cristo, y una mezcla de la humanidad de Cristo con la humanidad del hombre, como dos gotas de cera que se funden, como dos fluidos que se confunden, como dos cuerpos blandos que se mezclan, como dos unidades que se suman. Y después el  “maridaje” no se rompe, sino por el divorcio voluntario de nuestra parte; y alejado este caso, la unión es permanente y duradera, y la naturaleza superior informa la inferior, y da mérito sublime a las acciones de ésta, sin extinguir su actividad ni borrar su personalidad.

        Yo no sé si podría decirse que hay en lo que meditamos una cierta hipóstasis divina que hace buena la frase de San Pablo; pero sí puede afirmarse que hay una cierta segunda encarnación en el hombre que comulga, y que su mismo cuerpo y alma vienen a ser sede del Hijo de Dios hecho hombre, y a consolidarse con Él por un modo admirable y supernatural.” (Lámpara del Santuario 1886, página 281 y siguientes)

PREGUNTAS BREVES

         1ª PREGUNTA

         ¿Por qué dice el Señor en el capítulo VI del evangelio de San Juan: “En verdad, en verdad os digo que, si no coméis la carne del Hijo del Hombre y no bebéis su sangre, ¿no tendréis vida en vosotros?  ¿A qué vida se refiere Cristo?

         2ª PREGUNTA

        ¿Por qué dice el Señor: “El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él?”

         3ª PREGUNTA

        ¿Por qué la comunión es más que estar cerca del Señor, recibir consuelos y ayudas espirituales o materiales? Quien ve a Cristo ve al Padre. ¿Por qué en el mismo evangelio dice Jesús: “Igual que el Padre que me envió vive y yo vivo por el Padre, así, aquel que me come vivirá por mí”?